El ascensor y la nueva normalidad, cómo utilizarlos de forma segura

Estos últimos meses, y como consecuencia del covid-19, hemos vivido situaciones excepcionales que nos han obligado a modificar muchos de nuestros hábitos y actividades cotidianas. Una de las acciones que realizamos con mayor frecuencia en nuestro día a día es la utilización del ascensor, ya sea para acceder a nuestro hogar o lugar de trabajo.

Utilizar un ascensor implica desplazarse en un espacio de reducidas dimensiones y utilizado por una gran cantidad de usuarios diariamente. Es por ello que, para lograr preservar la distancia social recomendada y evitar la mayor cantidad de exposición a un posible contagio, debemos seguir una serie de recomendaciones y medidas extraordinarias para cualquier usuario pueda garantizar su total seguridad y una cómoda experiencia.

En primer lugar, debemos tener en cuenta que los ascensores generalmente tienen un diseño cuya capacidad no permite mantener la distancia de dos metros entre usuarios, por lo que es recomendable utilizar estos sistemas de forma individual (o solo por los miembros de una misma unidad de convivencia).

En segundo lugar, es necesario prestar atención al panel con los controles del ascensor, ya que estos son utilizados por un gran número de personas y debemos evitar el contacto con el mismo. Contar con una llave u objeto con el que pulsar los diferentes botones es otra de las recomendaciones con las que evitar el contacto directo reduciendo así el riesgo.

¿Y si mi ascensor cuenta con una puerta de acceso? En este caso lo recomendable es tratar de utilizar un pañuelo u objeto para manipular el tirador y abrir la compuerta, y el codo o los pies para abrirla desde dentro cuando lleguemos a nuestro destino y necesitemos salir de la cabina.

Gran parte de los ascensores son habitualmente desinfectados de forma regular, pero siempre es aconsejable contar con un producto de desinfección personal como los geles hidroalcohólicos disponibles en el mercado. Una pequeña aplicación de estos productos nos ayudará a mejorar la prevención ante cualquier posible contacto.

En último lugar, y ya refiriéndonos al entorno donde se ubica el ascensor, es importante evitar las aglomeraciones en las zonas comunes de nuestra comunidad así como en el acceso al ascensor en nuestro lugar de trabajo. Mantener la distancia de seguridad, utilizar mascarilla, y utilizar el sentido común, son algunos de los pasos clave que nos permitirán adaptarnos de la mejor forma a esta nueva realidad y continuar disfrutando de la comodidad y experiencia del ascensor en nuestro día a día.

¿Y tú, cómo te has adaptado a esta nueva situación y al uso del ascensor en tu rutina? Cuéntanoslo en los comentarios.